domingo, 3 de junio de 2012

Carta del viajero.

Hemos conocido el vasto fin del mundo, navegando de océano a océano, el viento fue nuestro único compañero entre los siglos de viaje, amando mujeres de costa en costa, amando ángeles del olvido cada vez que se elevaba el ancla; nuestros ojos conocieron todos los cielos, en las noches de tempestad nos elevamos hasta el corazón de las tormentas y bajábamos hasta las profundidades de los Maelstrom. Solo una luz nos guió siempre, el deseo de libertad absoluta. Viajeros que conocimos todos los reinos, que cantamos odas a todas las religiones, sin nunca atarnos a nada, siendo hijos del único azul que es cierto, conquistamos los mares, nunca temiendo, nunca dudando; el encuentro con la muerte no era algo para asustarse, sería el paso final de nuestro navegar.Algunos han llegado hasta allá, sus espíritus livianos viajaron hasta el límite que cruza el silencio. Yo me les uniré, feliz de zarpar por última vez, con el mar infinito en mi sangre y las alas de liberación en mi alma. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario